Y de repente...MAMÁ

El embarazo se hace largo, pesado, llega un punto en el que te sientes cansada, aunque feliz y orgullosa por lo que esta a punto de sucederte.

Y de repente llega el día, sin previo aviso, así de golpe, de repente eres mamá.

Dicen que cuando nace un hijo sientes un vínculo sobrenatural que te une a ti para siempre, si ese vinculo existe pero ¿quién es ese bebé?

De repente te plantan un bebé encima de tu pecho y te dicen "tu hijo" ¿quieeennn? Piensas mientras lo miras y lo remiras ¿mio? Si tuyo, y para toda la vida tuyo. 

Esa primera noche no duermes porque solo quieres mirarlo, y así ocurren las siguientes noches e incluso el primer mes.

Le coges las manitas y cuentas diez deditos en cada una de ellas, comparas su manita con la tuya mientras vuelves a repasar q tiene todos su deditos. Lo mismo pasa con sus pies.

Y de repente un día eres mamá... Un bebé con enormes ojos azules te mira esperándolo todo de ti... Tu corazón estalla de amor pero tb de dudas... 

Lo peinas y repeinas hasta encontrar el peinado que mejor le queda, primero con flequillo, luego con la ralla a la izquierda.. Piensas como lo querrá llevar él...

Le llamas por su nombre para acostumbrarte a pronunciar ese precioso nombre que tanto te costó elegir para que fuera el perfecto para él, aquel nombre que refleje su personalidad... y te preguntas si le gustará...

Empiezas a leer diferentes maneras de crianza, de alimentación, diferentes técnicas de hacerlo dormir, diferentes métodos de educación... Todo son palabrejas estrañas que no habías oído en tu vida.

Ahora solo hay una cosa importante en tu vida... Tu bebé.

Hasta ahora no sabias lo que realmente significaba el ser madre, no sabias la profundidad de ese sentimiento que nace en el mismo instante que nace tu bebé.

Nacen las dudas y las alegrías, nacen los miedos y el amor maternal... No todo es bonito en este viaje pero todo es superable si tú bebé te regala una sonrisa.

Te haces fan de millones de páginas de Facebook sobre maternidad, solo piensas en ir a comprar cositas a tu bebé porque aunque tú necesites algo siempre encontrarás la escusa perfecta para que tus compras se centren en él. Lees mil artículos para ser la mejor madre del mundo y te desesperas al ver que tu hijo no es de revista... Porque los niños también lloran, y se despiertan de madrugada con ganas de fiesta, a veces no quieren comer, se ensucian, hacen ruiditos... 

Ves a esa mamá de revista tan perfecta con su bebé perfecto y luego te miras a ti en el espejo... Con ojeras, despeinada y vistiendo ese chandal que jurastes no vestir nunca... 

Cuando nace un bebé también nace una mamá especial para ese niño... A él poco le importa que su mamá vaya a la moda, peinada de peluquería o con la manicura francesa perfecta en sus manos... Él sólo necesita a su mamá... Esa mamá que lo acuna, lo alimenta y le da cariño... Para él esa es la mamá perfecta.

Tú bebé solo quiere que seas su mamá, con tus virtudes y defectos, tus manías y cualidades... Tienes todo lo que tú bebé necesita, para él eres perfecta!